La Oficina Anticorrupción (OA) presentó la plataforma RITE en el evento desarrollado por el Instituto de Auditores Internos de Argentina (IIA). La apertura y moderación de la actividad estuvo a cargo de Silvia Nuñez, prosecretaria del Instituto quien expresó: “Como auditores nos interesa estar al tanto de todos los cambios y actualizaciones que sean tanto en el marco regulatorio como en mejores prácticas”.
Seguidamente, el subsecretario de Planificación de Políticas de Transparencia de la OA, adelantó: “venimos a contar sobre RITE en los días en los cuales está viendo la luz, desde la semana que viene van a poder ver a las empresas inscriptas como pioneras en la plataforma que estuvieron trabajando en el despliegue de opciones que tiene la plataforma, que días más tarde se pondrá online para el registro de todas las empresas del país que quieran ser parte”.

En su exposición, Luis Villanueva detalló el marco en la cual se pensó la herramienta: “es una iniciativa del Estado argentino que además viene desarrollándose en la región y otros lugares. México fue el primer país que impulsó la iniciativa, ahora hay otros países además de nosotros que vienen trabajando en esto”. RITE, explicó el subsecretario, “parte de entender que la corrupción es un fenómeno complejo, multicausal, relacional, es decir que surge en la mayoría de los casos en la vinculación público privada. Es un fenómeno que sucede en las vinculaciones entre empresas y personas, o instituciones, que es imposible encasillar en un solo lugar. Se puede dar desde cualquiera de los dos lados del mostrador y por lo general en el mostrador, donde se cruzan las voluntades y se toman decisiones”.

RITE se enmarca en el enfoque preventivo que adoptó la Oficina en un contexto internacional donde “casi todos los países vienen desarrollando políticas preventivas más que en sanción e investigación, no es que no tengan que hacerse sino que hace a la tarea de otros organismos del Estado. Los gobiernos piensan políticas para la prevención, y oficinas como la OA, se dedican a generar políticas de integridad, y ésta (RITE) es una de ellas”.

La plataforma, agregó Luis Villanueva, tiene como base también la Ley de Responsabilidad penal de las personas jurídicas que se aprobó en 2018 y “tiene dos ejes de trabajo: uno relacionado con los casos judiciales en el ámbito de Tribunales. A la vez, en un segundo eje, promueve la obligatoriedad de tener un programa de integridad, esto es para determinado tipo de vinculaciones con el Estado. La ley nos planteó un camino con una lógica preventiva desde donde trabajar con el sector privado en la implementación y desarrollo de programas de integridad que fortalecieran la posibilidad de generar ámbitos más íntegros en la vinculación con el sector público”.

Por su parte, Karina Kucyk, consultora internacional para Banco Interamericano para el Desarrollo (BID) y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), enfatizó en que “RITE es una plataforma para el registro voluntario de las organizaciones que tienen interés en el desarrollo de acciones de integridad para mejorar la transparencia de sus operaciones, pero también es una herramienta para mostrar y compartir cuáles son sus políticas y acciones específicas en compliance”.

Dentro del Registro, contó Kucyk, “en el registro se prevé: un avance a través de niveles, el aporte de documentación e información, la actualización periódica de la información y el acceso diferenciado a la información. La ciudadanía va a poder ver cuáles son las empresas registradas y en qué nivel, a la vez que las empresas registradas van a ver la documentación e información aportada por otras empresas que se encuentren en igual situación y en el mismo nivel”.

Luego de mostrar el simulador de la plataforma, la consultora internacional explicó que se está trabajando en el RITE 2: “la segunda etapa sobre la base del concepto de que integridad no se puede asociar únicamente con corrupción, es un concepto más amplio, en esa línea la idea es trabajar en la fase RITE género, y está previsto derechos humanos y medioambiente, bajo la misma metodología que la primera parte de coconstrucción, ahora se terminaron las mesas de trabajo de género, ya hay un formulario prácticamente cerrado”.

Después de las exposiciones, se dio un espacio para las preguntas y consultas de parte de los auditores que participaron del encuentro.